Despertar la consciencia es un gran paso de transformación y reto continuo, que se vive a diario, desde dentro hacia fuera, una vez que nos llega ese momento de iluminación y se abren los ojos, es irremediablemente revelador todo lo que desde ahí empieza a suceder.
Cada experiencia, agradable o desagradable, empieza a verse de manera distinta, el cuestionamiento aparece sin duda y la determinación de hacer algo positivo con todo lo que llega a nuestra vida, es una de sus consecuencias.
En esta ocasión quiero hablarles de lo que viví en un entrenamiento llamado «crear poder sin límites», que puso a prueba mi fortaleza y emociones. Con cierto orgullo, debo decir, que vengo de un proceso diferente al que viví hace un par de semanas, un proceso que lo he trabajado desde hace 3 años atrás. Lo que ya había aprendido, en esta ocasión me sostuvo, me dio perspectiva y mostró todo eso que las personas podemos alcanzar y trascender. A esta nueva experiencia, llamada entrenamiento de alto rendimiento, le di una lectura crítica, fuera de lo que la mayoría de la gente aparentaba sentir.
De un contenido que me resultó cercano y familiar, hasta el momento macabro inducido, de sufrimiento colectivo, (innecesario en mi opinión), me quedo con la consigna de que para crear ese poder interno, que no tenga límites, se requiere romper con muchos paradigmas.
«Decisión sin acción, no sirve para nada», fue una de la reflexiones con la que estoy de acuerdo y que me llevaré de este entrenamiento, con la intención de seguir aportando a esa congruencia diaria en la vida.
Encontrar nuevos espacios de pensamiento para el debate y hacer nuevos amigos, fue probablemente lo más divertido, en medio del baile y la algarabía (que también tenía un particular objetivo), pero mirar la vulnerabilidad en todo su esplendor, los traumas y la oscuridad que todos llevamos dentro, me hizo pensar en la fragilidad y emocionalidad que cargamos todo el tiempo, que podría convertirnos en una presa fácil y manipulable, si es que no tenemos en claro quiénes somos, qué queremos y qué sentimos.
Cada quien vive en su propio mundo, lucha sus batallas y a veces hasta se adoptan algunas ajenas; y para transformar la forma de pensar, actuar y sentir, es necesario estar dispuesto, convencido y ser claro que los procesos toman tiempo, no ocurren en un entrenamiento de fin de semana, ni en tres o seis meses, unos procesos son más rápidos que otros, por supuesto, pero todo dependerá del movimiento y la convicción que se tenga para alcanzar una meta y objetivo. Ninguna terapia, píldora, entrenamiento o sesión de consulta, es milagrosa, los verdaderos cambios son sostenidos en el tiempo y se viven desde la propia experiencia, para conducir a la real transformación.
Tener claridad y sensatez para saber lo que se desea desde el corazón, hace que todo sea más sencillo. Hacer elecciones desde el amor y no desde el miedo, es el paso más importante para la propia evolución.
Con nada de asombro les diré que hay más personas rotas y vacías de lo que imaginamos, que están ansiosas de que algo externo llegue a su vida, para salvarles de sus propias ataduras.
En conclusión, todos podemos crear poder sin límites y para eso tenemos que estar dispuestos a echarnos un clavado hacia la incomodidad y empezar a tener nuevas conversaciones, empezando con nosotros mismos.
Yo elijo quedarme con lo mejor de este entrenamiento, lo que suma a mi vida, porque como dicen por ahí los expertos, mientras no reste a tu vida, es bueno, sin embargo creo fielmente que cada quien es libre de escoger qué vivir, con quién hacerlo y para qué. No juzgo la intencionalidad, pues es complejo entender de dónde a dónde va, pero debo confesar que me sorprendió el marketing utilizado en medio de emociones provocadas, la intensidad con que se usa y cómo se aplica una metodología, para trabajar desde la fragilidad, la culpa y los vacíos, para lograr un negocio.
El libre albedrío es definitivamente el mejor regalo que nos ha sido dado, en esta vida que es una sola y es nuestra responsabilidad, vivirla lo mejor que se pueda.
Pienso. Creo. Escribo.
Todos tenemos dos vidas. La segunda empieza cuando nos damos cuenta que sólo tenemos una.
Confucio
Excelente reflexión!!
Sabías y poderosas palabras.
«cada quien es libre de escoger qué vivir, con quién hacerlo y para qué»
La libertad de escoger que vivir esta atada a costumbres y
prejuicios y en la mayoría de los casos terminas viviendo la vida que otros quisieron vivir.
Con quien hacerlo?, tentar a la suerte o es instinto
Para que? en que momento de tu vida tienes totalmente claro para que vives y si definitivo, si tomamos en cuenta que somos seres cambiantes
Dudas o certezas que te encaminan a buscar un buen vivir no importa el momento de tu vida
Así es el momento es ahora, no importa la edad ni las circunstancias para romper con todas las ideas limitantes!!